¿Cuáles son los mayores problemas a los que se enfrenta la humanidad? En cualquier parte del mundo en donde hago esta pregunta, escucho respuestas bastante similares: la falta de educación y oportunidades, la pobreza, la desigualdad, la violencia y la guerra, la degradación ambiental.
Pero estar de acuerdo en que existe un problema no es lo mismo que saber cómo solucionarlo. Cuando hablamos de gasto en desarrollo y de filantropía, es demasiado fácil malgastar el dinero —y perder oportunidades— porque esta importante distinción es ignorada.